martes, 24 de diciembre de 2013

Capítulo 52: Jealousy and cowardice.

Medio año después...

(POV Paula)
Cojo mi mochila y salgo corriendo en dirección al instituto. Llego justo a tiempo, cuando paso la puerta de entrada al edificio ya ha sonado el timbre. Entro en clase y me siento entre Beverley y Yale. Cuando llegue al instituto fueron los primeros en recibirme con los brazos abiertos. Beverley y Yale son mellizos, Beverley tiene el pelo castaño claro al igual que su hermano, la diferencia eo que ella lo tiene largo. Los ojos de ambos son verdosos y grandes, no sé porque pero retienen mi atención.
-Hola Cassi...
-Hola Ya...y Be.
-Adivina quién tiene ya los examenes corregidos-dice Beverley canturreando.
-El de historia...
-Bueno eso dicen.
-Si es que me encanta ese hombre.
-¿En serio?-pregunta Yale arqueando las cejas.
-Sí, es que me encanta cuando viene con ese jersey de cuadros rojos y verdes, ya no te cuento cuando a la vez trae sus pantalones de pana beige...
-¿Me estas tomando el pelo? ¿Verdad?
-Pues claro que si Yale...lo dice porque saca buenas notas-dice Be.
-Tss...chicos acaba de llegar...-digo rápidamente.
-Lo sé, cuesta no fijarse en él con esos pantalones con dibujos de ladrillo...¿dónde se los habrá comprado?-susurra Cy con seriedad.
-En Ikea vi unos, quizá te los compre para navidad-dice Be casi riendose.
-Señorita Bellisario, ¿se puede saber qué le hace gracia?
-Nada...es que la camiseta de Cassandra me hace gracia.
-Esta bien...bueno chicos vuestros examenes están corregidos...ire pasando por cada mesa con la nota y enseñando los errores.
El profesor fue pasando por cada mesa hasta llegar a la mía.
-Señorita Del Bianco, tiene un 9'75 en este examen. Son fallos sin mucha importancia los que ha tenido. Enhorabuena, sigue siendo la mejor nota de clase.
-Gracias.
-Bellisario, usted tiene un 9. Sus notas han mejorado mucho desde el curso anterior. Espero que sigan así.
-Gracias- dice Yale mirandome de reojo.
-¿En qué has fallado?-me pregunta en cuanto el profesor se va.
-En una fecha y en esta definición, le he puesto una flecha en vez de dos punto. ¿Tú?
-Más o menos lo mismo, dos fechas y no acerte una definición. ¿Qué ha sacado Be?
-Un 5'55, pero esta pegando saltos de alegria.
-Bueno, para ella un 6 es como un10 así que dejala-me dice sonriendo-te voy a alcanzar, ya veras superare esa nota-dice señalando mi examen.
No puedo intentar reprimir una pequeña risilla, pero no porque no crea en él sino porque la cara que ha puesto es de un completo obsesionado.
-No lo dudo...fijo que me pasas.
Pasan las horas hasta llegar al fin de las clases, a la salida me depido de ellos y espero a que John llegue. Encuanto aparece me meto dentro del coche y le doy un beso.
-¿Qué tal el día?-dice agarrando ya el volante.
-Bien y ¿el tuyo?
-También bien.
No tardamos en llegar a casa, entro y me dirijo a mi habitación. Poco después estoy en la cocina con John haciendo la comida.
-Ya que es tu cumpleaños podiamos hacer algo especial, acaso que prefieras celebrarlo en noche buena o vieja.
-Puedo esperar a noche vieja. ¿Cuándo acabas las clases?
-Pasado mañana.
-Pues no se hable más, espero hasta noche vieja.
-Hoy he quedado con Yale, vamos al centro comercial y quizá luego vayamos al cine.
-...
-¿Qué te pasa?
-Nada, nada.
-¿Estás celoso?
-No...
-Estás celoso.
-Bueno es que...él tiene tu edad, es guapo...
No le dejo decir nada más, junto nuestros labios en un beso intenso, él me coje por la cintura y me pone sobre la mesa. Besa mi cuello, enreda sus dedos en mi pelo, tira de él hacia atras para seguir besando mi cuello más ampliamente.
-Ilan...no quería cortar el rollo, pero es que se va a pasar el arroz.
-Que le den al arroz, puede esperar.
-Venga-le digo apartandolo de mi-que esta noche sino qué vamos a hacer, contar ovejitas.
-Podemos repetir.
-Anda venga, que tengo hambre.
-Yo también te puedo dar de comer.
-Sigue así y esta noche acabaras contando ovejitas.
-Vale, vale. No te enfades-dice dandome un beso.
Unas horas depués me encuentro con Yale en el centro comercial.
-Dime a qué venimos aquí.
-A pasar la tarde-dice con una sonrisa impecable.
-Tu hermana esta...
-Con Ellery...no me cae muy bien ese tío, pero bueno...supongo que es lo que me queda por aguantar.
-No sé a mi me calló bien cuando tu hermana me lo presentó.
-No si con las chicas se comporta bien, es decir, intenta ligar con todas, pero mi hermana no se da cuenta...
-Bueno ya se dara cuenta...¿has intentado decirselo?
-Se lo he dicho...pero me dice que simplemente me fastidia verla feliz, porque yo no estoy cont...
-Con...
-Con nadie. Dice que nunca superare lo de Kya...ya sabes...
Asiento con la cabeza, a veces me fastidia no poder decirle que no soy Cassandra que soy Paula, que yo me he sentido tan mal como él, que yo también he perdido a un ser querido, pero es mejor así. Al menos eso pienso yo, que no conozcan mi pasado hace que sea más fácil crearme un futuro. Kya había sido una novia que Yale tuvo hace un año y medio. El día de su cumpleaños, Yale la esperaba en su casa para darle una sorpresa, pero ella nunca llegó.
-Bueno vamos a alguna tienda, que aquí me aburro.
-Vale.
Nos pasamos la tarde de tienda en tienda, simplemente ojeamos videojuegos, consolas...
-Oye me acabo de acordar que necesito ropa para fin de año, es decir, un vestido o algo así, te importa si me voy a buscar uno mientras tu sigues jugando, sera solo un momento.
-Puedo acompañarte, no me molesta...de donde te crees qué salen todos esos modelitos qué tiene mi hermana.
-Como quieras, yo era por no molestarte.
Yale me sonrie, coje mi mano y me lleva a la tienda más cercana que hay. Comenzamos a ojear vestidos y enseguida encontramos uno que podría llevar en esa noche tan especial. Una vez me lo he probado, creo que ya no quiero quitármelo.
-Creo que me lo voy a llevar puesto-digo riendo mientras comienzo a dar vueltas con él.
-La verdad es que te queda muy bien, por cierto, no sabía que tenías un tatuaje en la espalda.
Me había pillado, claramente aquella huella del amor de Angel no se podía borrar, a veces los recuerdos son permanentes. Rapidamente intente buscar una explicación a aquella situación.
-Pense que te lo había dicho, me lo hice antes de venir aquí. Es decir, recuerdas que yo vivía en Polonia ¿no? Pues unos meses antes de venirme a Francia me lo hice.
-Me sigue sin cuadrar que seas de Polonia y tengas nombre francés...
-Ya te lo dije, mi madre era francesa. Además tu nombre es alemán y tu apellido de origen griego.
-Bueno, pero tu apellido es italiano y tu padre era polaco. Además el de mi hermana es francés.
-Mi abuelo era italiano, ¿de verdad vamos a ponernos a hablar de mi árbol genealógico?-digo riendo, intentando quitar hierro al asunto.
-Hombre ya que estamos...-dice riendose-eres muy rara, medio francesa, medio polaca, con raíces italianas...e ¿Ilan? ¿Es tu hermano o hermanastro?
-Hermanastro...su padre era inglés.
-Vaya...la verdad es que no os pareceis mucho...bueno supongo que al tener distinto padre...
-Ya bueno, si te consuela nos parecemos en el blanco de los ojos.
-Jajajajajaja...bueno...¿te vas a llevar el vestido puesto?
-Supongo que lo mejor sera que me lo quite, si lo ando luciendo ya ahora para noche vieja no sera una sorpresa.
-Si, supongo que si. Pero bueno te queda tan bien que yo no me cansaria de verte.
Le sonrío y vuelvo al probador, me quedo mirandome al espejo, me doy la vuelto y puedo observar que el tatuajes es bastante visible, pues mi piel es palida como la leche. Vuelvo a ponerme la ropa y poco después estamos en el cine.

Dos horas después...
Es noche cerrada, acabamos de salir del cine y estoy de vuelta a casa. Yale se ofrece a acompañarme, hubiera vuelto sola en bus o andando, pero Yale insiste. Nos pasamos todo el camino hablando, llegamos hasta mi casa y nos paramos en la puerta.
-Bueno...me lo he pasado muy bien-le digo sonriendo.
-Sera la compañia-dice riendose-bueno me daras al menos un beso ¿no?
-Claro que si.
Le doy un beso justo en la mejilla y él me abraza. Justo en ese momento oigo el ruido de la puerta abriendose.
-Hola chicos-dice con una voz algo molesta.
-Ilan...bueno...Yale me lo he pasado muy bien, nos vemos mañana-le digo a la vez q me despido con la mano.
-Hasta mañana-dice con una sonrisa.
Entro en casa y John parece que acaba de ver un fantasma, esta blanco como la leche.
-¿Estás enfadado?
-...
-Vale, pues enfadate...esta noche contaras ovejitas.
-Con eso no me vas a chantajear...
-¿A no?
-No.
-Vale. Solo somos amigos, pero bueno.
-Tú también eres celosa.
-Yo se quienes son solo amigas y quienes son las que no entienden que el amor es cosa de dos.
-A Yale le gustas, crees qué no lo noto...
-¿Y si le gusto qué pasa? Si a quien yo quiero es a ti-le digo cogiendole la mano.
-...lo mismo podria decir.
-Vale...pero por eso prometeme que no te vas a ponerte borde con el.
-Bueno...-me dice sonriendo, pero tapo esa sonrisa con un beso.
Mis labios bajan por su cuello y desabrocho su camisa, mis labios siguen descendiendo.
-Supongo que no quieres cenar ¿no?-dice riendo.
-Bueno si tienes hambre paro y cenamos.
-Ni de broma.

(POV Yale)
Llego a casa y estoy más feliz que una perdiz. Mi hermana sigue en el sofá con Ellery.
-Hola hermanito, ¿qué tal con Cassi?
-Bien, acabo de acompañarla a casa.
-¿Y?
-No le he dado un beso, su hermano nos ha interrumpido. Ella me lo ha dado, pero en la mejilla.
-Bueno algo es algo. ¿Hubo abrazo al menos?
-Si, se lo dí yo. Es que ya sabes Ilan va en plan "yo soy su hermano mayor y tu no eres lo suficiente bueno para mi hermana".
-Bueno...espera un poco quizá ceda...y bueno si Paula es muy guapa y lista...pero algún defectillo tendra.
-Quizá que corre hielo por sus venas-dice Ellery.
-Oye no te metas con ella...lo dices porque no te presto mayor atención cuando te la presentamos eh so capullo.
-Bever mira lo que me dice tu hermano.
-Ya para ya...largate ya hablaremos.
-Eso tu refujiate detrás de mi hermana...cobarde.
-¿Cómo has dicho?-dice levantandose.
-Cobarde...¿lo has oido? ¿O te lo repito?
En ese momento Ellery se abalanza sobre mi e intenta darme un puñetazo, pero lo esquivo y le doy un golpe en la mandíbula. Esta desorientado y solo consigue darme un golpe en la ceja, pero el golpe es fuerte por lo que enseguida mi ceja comienza a sangrar.
-Eres estupido...estas con mi hermana pero a la vez estas ligando con 50.
Vuelve a intentar pegarme, pero no lo consigue. Le pego un puñetazo en la nariz y el me pega en el labio.
-Parar ya joder-grita Beverley llorando.
Me separo de Ellery y me largo a mi cuarto. Me miro en el espejo de mi armario y me sangran la ceja y el labio, pero no hay mayores daños. Me voy al baño, limpio las heridas e intento que no se vean tan mal. Vuelvo a mi cuarto y puedo oir como alguien se acerca por el pasillo, no tengo dotes de adivino, pero se de sobra que es mi hermana, supongo que vendra a echarme la bronca.
-Si vienes a echarme la bronca puede volver por donde has venido-le digo antes de que ella toque el pomo de la puerta, pero parece no haberme oído.
-No vengo a echarte la bronca, tienes razón sobre lo de que liga con todas...le limpiare las heridas a Ellery y al mínimo motivo que me de rompere con él. ¿Contento?
-No es cuestión de que yo este contento...lo hice por ti...para que vieras que yo no estaba equivocado, que él no te quería.
-Esta bien...-sale del cuarto, cerrando la puerta con la mayor suavidad posible.
Me tumbo en la cama y finalmente me quedo dormido.

¡Feliz 2014!
Bueno chic@s que tengais un buen año y espero que os guste el capítulo.

domingo, 8 de diciembre de 2013

Capítulo 51: The Change.

(POV Paula)
Los días pasan como si fueran segundos, vuelvo a mi rutina. Casa, instituto, casa. Todo vuelve a ser más o menos normal en lo que a la vida cotidiana se refiere. Pero en mi interior todo ha cambiado por completo... Bueno eso y que ya no me hago llamar Paula...

(POV Andrea)
La Odisea de Homero es incomparable con la situación en la que los días me han atrapado. Agobio constante, paso más tiempo con Johs que con mi hermana. Paso los días llendo al instituto y viendo a Josh, mi hermana apenas puede estar una hora dentro del hospital. Victor la pasea de un lado para el otro, la mantiene entretenida. Al igual que a mi hermana a mi también me lleva de un lado al otro. La madre de Josh, pasa los días al lado de la cama de Alicia, se duerme y se despierta al lado de su cama. Mientras que Josh alguna que otra noche no tiene compañia, yo no podre estar ahí siempre. Su padre se ha encerrado en casa, no lo he visto desde que fue a hablar con el doctor que atendió a Josh. Victor intenta quedarse alguna que otra noche, pero a veces Josh duerme solo.

(POV Angel)
Espero sentado en una silla del aeropuerto, mi vuelo lleva dos horas de retraso. Richard me mira con cara de pocos amigos, supongo que no le hace gracia que salga con su sobrina. Me vuelvo a casa, a la espera de que lleguen noticias de ella. Aunque quiza no la vuelva a ver...Llevo días buscandola por Londres y lugares cercanos, pero es una busqueda sin resultados. Supuestamente ibamos a buscarla entre todos pero el accidente de Josh y Alicia a roto todos los esquemas o más bien organización que tuvieramos. A veces fui algo duro con ella, pero yo era así y ella aprendió a convivir con mis manias. Eso creía, ahora no sé lo que creo.

(POV Lay)
Los días transcurren, las idas y venidas del hospital son ya rutina. Dany cada vez tiene más trabajo y yo cada vez estoy más dolorida, con todo el cuento de la medicación. Pero intentamos que nada nos llegue a afectar demasiado. Dany intenta calmar mis dolores con miles de besos y abrazos, cada día solo pienso en estar presa en sus brazos. No sé si refugiarme en él ante todo sera una buena idea, pero es que solo hay un problema al que me apetezca enfrentarme... Acaba de llegar a casa, se sienta a mi lado y me besa. Noto que sonríe contra mis labios.
-¿Qué?
- Nada, es que te prefiero con el pelo así...
-Ja-ja-ja...no bromees con eso...
- No bromeo, simplemente pienso que estas bien así, tus ojos resaltan más ahora. Ya se que lo del color no es importante, sino lo que te transmiten, pero hay que decir que en tu caso se da la primacia del color de los ojos.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Capítulo 50: Remember, you must wake up.

(POV Andrea)
Sujeto mi cabeza entre mis manos, no entiendo porque me pesa tanto. Me escondo en la sala de espera, no quiero ir a la puerta a recibir a los padres de Josh. No me siento con las suficientes fuerzas para decirles que Josh estará “dormido” durante un tiempo. Intento aparentar que estoy bien, calmada y tengo que creérmelo. Víctor llega corriendo, los padres de Josh acaban de llegar y quieren hablar conmigo. Me quedo mirándole durante unos segundos, es increíble la calma que muestra, mientras yo tengo los nervios a flor de piel. Víctor se acerca y me mira, pero finalmente me tiende la mano par ayudarme a levantarme, caminamos por el pasillo y no se donde posar la mirada.

-Andrea…deberías calmarte, no puedes caerte y quedarte sentada, metafóricamente. Sus padres están peor que tú, necesitan ayuda y tú se la puedes ofrecer.
-Lo sé…-es lo único que soy capaz de decir.

Intento que el cuerpo no me tiemble, la presión me aplasta, me agobio, el latido de mi corazón bombardea mi cabeza, cuando llegamos antes los padres de John ya no sé si seré capaz de hablarles, respiro para calmarme y por fin me veo capaz.

-¿Dónde esta mi hijo? Andrea, necesito verle…-dice su madre a modo de súplica-…necesitó saber qué ha pasado, quiero que me lo explique…por favor.
-Brenda por favor…necesito que te calmes antes de nada…-le digo intentando que no me tiemble la voz-…él no te va a poder explicar nada…
-Ya bueno ahora mismo supongo que no…pero más adelante sí ¿no?-pregunta viendo que mi cara cada vez se torna más pálida- ¿qué le ha pasado?
-Ahora mismo está…está…está en coma-digo por fin, pero esas palabras no hacen que me sienta mejor- lo siento mucho, fuimos a verle en cuanto nos comunicaron en que habitación estaba. Allí nos encontramos con él doctor y nos explicó por alto su diagnostico.
-Por Dios…-dice llorando- podéis…llevarme a su habitación…por favor.

Asiento levemente con la cabeza y la cojo de la mano dirigiéndome a uno de los ascensores. Miro hacia atrás, su padre esta cabizbajo, a su lado Víctor habla con él. Parece que se van a buscar al doctor que atendió a Josh. Me meto en el ascensor e intento consolar a Brenda, pero claramente todo esfuerzo es en vano, al igual que hace unos momentos yo estaba hundida, Brenda lo esta ahora. La acompañó hasta la habitación y me quedo en la puerta, pero ella me hace una seña para que la acompañe. Ambas entramos, pero solo una se queda petrificada al ver a Josh. Brenda se acerca lentamente como si temiera despertarlo y posa levemente sus labios en la frente de Josh, acaricia con sumo cuidado su cara y finalmente se echa a llorar. Me acerco a ella par intentar aguantarla, pues casi se va de bruces al suelo.

-¿Y…y Alicia?-me dice en un suspiro-¿ella está bien?
-No lo sé, hace unas horas estaba en quirófano, pero no se cuanto tiempo les lleva la intervención…no se ni si la han pasado a planta…
-Necesito verla a ella también…vivía con nosotros, por lo que debo también estar con ella.
-¿Está segura?…si quiere puede esperar aquí con Josh. Yo iré a ver si está bien.
-No, no, te acompaño, no puedo quedarme aquí sola con Josh…no soy capaz. Otra madre igual estaría a su lado todo el día, pero yo no…no me siento bien quedándome sola con él.

Asiento con la cabeza y la acompaño hasta recepción, donde nos confirman que Alicia ya ha sido trasladada a planta. Nos dirigimos a su habitación, que no esta muy lejos de la de John. Entramos en el cuarto y un médico le esta pasando una última ojeada a sus heridas.

-¿Esta…-es lo único que soy capaz de decir antes de que el médico me corte.
-Esta dormida…pero no se preocupen se despertara en una media hora o algo menos. ¿Son ustedes sus familiares?-dice girándose y dirigiéndose a nosotras.
-No…yo soy su amiga y esta es la mujer…
-Ella estaba estudiando aquí y yo la acogí en mi casa-dice Brenda.
-Vale…y ¿sus padres?
-No están aquí, bueno no viven en Londres-vuelve a responder.
-¿Los han avisado?
-No todavía no.
-Bueno…pues para que puedan avisarles de lo que ha sucedido les comentare mí diagnostico.

El hombre comienza hablar, nada importante un par de costillas rotas, algunas fracturas, puntos en la cabeza, Nombra la parada cardíaca, algunas heridas con un poco más de importancia. Él sigue narrándonos su diagnóstico, pero yo examino a Alicia desde la puerta. Claramente se nota que el golpe no ha sido nada suave, tiene cortes por la cara, puntos en una ceja… Múltiples heridas que aunque tardaran en curarse, no son comparables con las heridas psicológicas. Tiene un tatuaje en la muñeca, no me había fijado antes, es un nombre o al menos eso me parece a mi. Cuando el doctor se va nos acercamos con urgencia a la cama de Alicia, parece tranquila, incluso parece que esta teniendo un buen sueño.
-Andrea... ¿podría pedirte un favor?
-Claro que si...dime ¿qué sucede?
-Quiero encargarme de los cuidados de Alicia, por lo que ni podré prestarle atención a Josh, querría que tú estuvieras con él hasta que despierte si puedes claramente...
-Si, no te preocupes...pero ¿por qué no puede estar con Josh?
-No quiero verle así…es decir…
-Lo entiendo no hace falta que me lo explique…se lo que quiere decir.
-Gracia…
-No hay que darlas. Me voy a ver a Josh…
-Vale…

Salí de la habitación como una exhalación, directa hacia la habitación de Josh. Entre y me senté en el sillón que estaba al lado de su cama. Cerré los ojos durante un instante, tratando de organizar mi mente, reconstruyendo todo aquello que en aquel día se había roto.


-Y luego me decías que a las velocidades que bajaba las escaleras del instituto me iba a matar-digo finalmente mirándole-que ironía de la vida. Por cierto tu chica está bien, es decir, no tan grave como tú, pero estable. Y además tienes que reconciliarte con ella, por lo tanto acuérdate debes despertarte.